Se inician las obras en Soto Playa esperando inaugurarse en Semana Santa el bar

El alcalde de la capital Carlos Martínez ha visitado esta mañana el inicio de las obras de recuperación de lo que fuera el antiguo Bar del Soto Playa con un ambicioso proyecto que contempla una zona de restauración y una oferta de ocio y deporte complementaria. Esta actuación se enmarca dentro de la fórmula de colaboración público-privada ya utilizada en otros espacios como el Bar del San Andrés, la Casa del Guarda, el Fielato o el recientemente adjudicado quiosco de La Dehesa.

La parte privada asume la inversión para la recuperación de un inmueble municipal degradado y el Consistorio cede la gestión del mismo durante un periodo de tiempo marcado en el contrato. Carlos Martínez ha explicado que “esta modalidad nos permite con capital privado recuperar patrimonio de la ciudad y además dinamizar entornos y generar empleo durante la ejecución y durante la posterior explotación”.El alcalde ha recordado que en estos cinco emplazamientos se moviliza una inversión que ronda los 3 millones de euros en las distintas fases y 45 empleos que podrían incrementarse en función de los picos estacionales por la relación directa de estos negocios con las temporadas turísticas.

Respecto a las obras del Soto Playa que han comenzado esta semana con la demolición de parte de la instalación y el arranque de los trabajos de encofrado, el alcalde ha explicado que “esta actuación nos permitirá disfrutar de un espacio que hasta ahora estaba abandonado y que se había degradado por el desuso. Hablamos de una inversión de un millón de euros y del objetivo de que entre en servicio en Semana Santa”.

Por otro lado, Carlos Martínez ha recordado que se cumple también con una “demanda de los ciudadanos que cada vez disfrutan más de su río, que han ido viendo como se incrementan también los servicios y que demuestran que es un lugar que les gusta y que quieren recuperar”. Este tipo de actuaciones también tiene una repercusión turística y el río así como todo su entorno se ha convertido “en un reclamo de lujo ya que Soria ha vivido muchos años dando la espalda al Duero y ahora mismo está totalmente integrado en la ciudad siendo uno de los principales foco de atracción de visitantes”. Este espacio, que permitirá ofrecer el servicio durante todo el año y sin limitaciones de tiempo, incluirá además de la zona de hostelería un proyecto de ocio y deporte activo con el embarcadero y con distintas alternativas para el disfrute de todos. Este recinto además complementará al Museo del Agua, el Lavadero de San Pedro así como la noria o el Ecocentro además de las distintas sendas y pasarelas puestas en servicio en las proximidades.

En la primera fase se recuperará la edificación existente y se habilitará en la zona de la antigua pista de baile un pequeño escenario o concha acústica temporal. El total de la superficie de la intervención ronda los 280 metros cuadrados con zona de restaurante, bar, cocina, aseos y almacén. También se contempla una pequeña zona de oficina. La terraza exterior tiene una dimensión de 215 metros cuadrados y el perímetro ajardinado supera los 350.