Collación de Santa Cruz y el Batallador (1)

A un tiro de piedra de la esquina nordeste de la concatedral de San Pedro se encontraba la iglesia de Santa Cruz, en torno a la cual se urdió una collación en los primeros tiempos de la Soria fundada por Alfonso I el Batallador en 1119.  Y quizás dos estelas funerarias discoidales medievales que hay en la tapia de una casa en la calle de la Santa Cruz correspondan al cementerio que tuvo. Dentro del templo había suntuosos sepulcros en el siglo XVI pero el traslado de destacados miembros del Linaje de los Santa Cruz a la entonces colegiata de San Pedro como patronos de la capilla homónima en la década de 1540 debió ser el inicio de su decaimiento hasta la extinción de culto hacia 1826 (1). Y a principios del s. XX aún se podían ver “algunas piedras”.

En el censo de diezmos de 1270 figuraban en esta parroquia-collación once vecinos, dos atemplantes y cinco moradores así como ocho lugares en la Tierra de Soria: Ledesma, Arévalo de la Sierra, Ventosa de Carranzano, Matarrebollo, Ventosa de Renivelas, Estepa de San Juan, Muño García y Tiñoso (2).

Linaje Santa Cruz

Sede fue durante siglos de las asambleas del Linaje de Santa Cruz, sobre el cual escribió Carlos Martel a finales del XVI y el plagiador Mosquera de Barnuevo poco después. Época era de cronicones e invenciones sobre los orígenes de los títulos nobiliarios y tampoco falto en este caso ya que lo hacían remontar nada menos que a la época celtibérico-numantina.

Así mismo se indicaba que los Santa Cruz fueron los custodios del rey niño Alfonso VIII hacia 1163 mientras su tío el rey Fernando II de León pretendía “apropiárselo” en contra de los Lara, y se creía que por eso en el fuero extenso (mal asignado a Alfonso VIII y/o Alfonso X el Sabio) se privilegiaba a la collación de Santa Cruz en el concejo de Soria del siguiente modo, como recoge Loperráez (3): “Los Alcalldes deben ser dizocho, con el Iuez, por razon que la collacion de Santa Cruz cadanno ha de aver un Alcallde, é de las otras treinta é quatro collaciones: las diz é siete collaciones den un anno sendos Alcalldes, é las otras diz é siete, otro anno otros sendos. Et por esta gracia que ha la collacion de Santa Cruz demás de las otras, non ha derecho alguno en el Iudgado”

Notas:

1.- VV.AA: El arte románico en la ciudad de Soria, Fundación Santa María la Real, Aguilar de Campoo, 2001, pp. 33-34.

2.-  María Asenjo González: Espacio y sociedad en la Soria medieval. Siglos XIII-XV, Diputación de Soria, 1999. pp.82-83.

3.- Juan Loperráez Corvalán: Descripción histórica del obispado de Osma con el catálogo de sus Prelado,  Madrid, 1778, vol. II, p. 98 . Y en p. 90, resume: “La Colación de Santa Cruz daba cada año continuamente un Alcalde, las otras treinta y quatro daban por alternativa diez y siete Alcaldes al año, y un Juez, que era el principal, corriendo este de una en otra, hasta igualarse todas en el discurso de treinta y quatro años; pero el Juez salía siempre de la Colación que en aquel año no daba Alcalde. No se podía tener concejo sin concurrir á lo menos diez. Los diez y ocho Alcaldes se repartían en tres Mayordomías, de seis en seis, y cada Mayordomía gobernaba quatro meses á Soria y los pueblos de su jurisdicción que se tenían como aldeas.. Los juicios se hacian por los Alcaldes, concurriendo dos siempre juntos”.

Autor: Ángel Almazán